EFE
Puerto Príncipe
El Senado de Haití condenó este martes cualquier intento de tomar el poder por la violencia y también condenó los “excesos” del Gobierno y de la Policía en la represión de los opositores.
La Cámara alta “condena todo intento de toma del poder político por la violencia o por otros medios contrarios a las reglas democráticas. Igualmente, condena todo exceso del Gobierno y de las fuerzas de Policía en el control de la seguridad y el mantenimiento del orden público”, afirma un comunicado firmado por el presidente del Senado, Joseph Lambert.
El comunicado se refiere a la denuncia de un golpe de Estado que realizó el pasado domingo el presidente Jovenel Moise y a la represión de las manifestaciones de los últimos días, en las que ha habido varios heridos de bala.
El Senado manifestó su preocupación por la situación que atraviesa el país y alertó de que desde “el comienzo del mes de febrero, ha tomado una aceleración que arriesga a conducir a un estallido y una desintegración de la nación haitiana”.
Finalmente, la Cámara alta hizo una invitación al diálogo y a respetar “estrictamente” las reglas consagradas en la Constitución para alcanzar el poder, para su ejercicio y su transmisión.
Las autoridades arrestaron el fin de semana a una veintena de personas implicadas en la supuesta conspiración golpista, entre ellos un juez de la Corte de Casación, máxima instancia judicial del país.
El lunes la oposición consideró vacante la Presidencia de la República y nombró presidente interino al juez Joseph Mécène Jean Louis, también de la Corte de Casación.
Horas más tarde, el presidente Moise ordenó la jubilación de Jean Louis y de otros dos jueces opositores, a pesar de que la Constitución impide expresamente suspender o cesar de sus funciones a los magistrados de la Corte de Casación.