LeBron James, la superestrella de Los Angeles Lakers, se perderá el último partido antes de la pausa por el Juego de las Estrellas (All-Star) debido a un esguince en el tobillo izquierdo, anunció el miércoles el equipo, vigente campeón de la NBA.
En lugar de viajar a Sacramento (California) para enfrentar este miércoles a los Kings, el alero permanecerá en Los Ángeles para recibir tratamiento.
A sus 36 años, James será baja por primera vez en una temporada en la que es uno de los candidatos al premio al Jugador Más Valioso (MVP), con promedios de 25,8 puntos, 8 rebotes y 7,8 asistencias en los 36 partidos disputados.
La noche del martes brilló de nuevo con 38 puntos, 5 rebotes y 6 asistencias en 37 minutos en la derrota de los Lakers en casa ante los Phoenix Suns.
El jugador ya venía arrastrando este problema físico y por el momento no peligra su participación en el All-Star del domingo en Atlanta.
James criticó con dureza la celebración de este evento, tildándolo de “bofetada en la cara” para los jugadores, ya que la NBA lo había cancelado inicialmente prometiendo a los jugadores una semana entera de descanso.
Con 24 victorias y 12 derrotas, los Lakers tienen el tercer mejor balance de la NBA esta temporada, solo por detrás del líder de la conferencia Oeste, Utah Jazz, con 27-8, y de los Phoenix Suns, con 23-11.
Tras el parón por el Juego de las Estrellas, los Lakers volverán a la competición el 12 de marzo en casa contra los Indiana Pacers.
Este miércoles, la franquicia angelina tampoco podrá contar con su figura Anthony Davis, lesionado en la pierna derecha, ni con el pívot español Marc Gasol, apartado del equipo por los protocolos de prevención del coronavirus de la NBA.